Productos de la tierra, sabores genuinos
El paisaje rural de Gran Canaria está lleno de referencias que hablan de una identidad ligada a la cultura campesina y a un intenso aprovechamiento del medio marino litoral.
Pero el desarrollo de los cultivos intensivos, la sobrepesca, la presión urbanística y el crecimiento del turismo han dejado un territorio rural y costero que se deja ver frágil con el abandono de la actividad agrícola, ganadera y pesquera tradicionales y con suelos degradados por el abuso de abonos químicos.
En este marco, la producción de alimentos tradicionales, naturales, sanos, equilibrados, ricos en nutrientes, representa una solución real y de calidad para resolver los problemas ocasionados por los desequilibrios. Unos productos de kilómetro cero, producidos junto a los consumidores que los demandan.
El soporte de estas producciones se basa en una agricultura, en una ganadería y en una pesca desarrolladas con la dedicación y la entrega de pequeños propietarios, por industrias familiares, con producciones a una escala reducida y muy diversificadas.
Gran Canaria y sus gentes del sector primario tienen mucho que ofrecerle, para deleitar su paladar, para aportar calidad y tradición a su mesa y a su dieta, para seguir haciendo historia juntos.
Vea si no estos productos tradicionales que van camino de convertirse en una parte de nuestra apuesta estratégica por alcanzar la soberanía alimentaria: